Nuestro objetivo
ABC de la Artritis Psoriásica es una iniciativa educativa que en conjunto con instituciones de Puerto Rico se dedican a velar por el bienestar de los pacientes que viven con esta condición para ofrecer herramientas de cuidado y manejo que impacten positivamente su calidad de vida.
Y sus preguntas frecuentes
Para diagnosticar la artritis psoriásica, un médico debe descartar otras causas de artritis, como la artritis reumatoide (AR) y la gota, con pruebas de imagen y análisis de sangre. Algunas de las pruebas de imágenes pueden ser radiografías, IRM y tomografías computarizadas y ultrasonidos, y otras pruebas como la de proteína C reactiva, velocidad de sedimentación globular, células rojas de la sangre, líquido articular y factor reumatoide.
La artritis psoriásica puede generar riesgos para el paciente si no se detecta y trata de forma oportuna generando complicaciones como: artritis psoriásica mutilante, problemas en los ojos, como conjuntivitis o uveítis y enfermedad cardiovascular.
Aunque no existe cura para la artritis psoriásica, si existen múltiples alternativas de tratamiento para los pacientes. Estas terapias se centran en controlar la inflamación de las articulaciones afectadas para evitar el dolor articular y la discapacidad, y en controlar la piel que se vea afectada. Uno de los tratamientos más comunes son los medicamentos recetados a los que se llama fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad. Sin embargo, cada caso debe tratarse de forma individual.
La fisioterapia y la terapia ocupacional podrían aliviar el dolor y facilitar hacer las tareas diarias. Consulta con tu especialista sobre estas alternativas y sigue cuidadosamente las indicaciones de los profesionales con el fin de no generar mayor daño articular.
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