junio 21, 2025

El renacer de Luka: una nueva vida con manos trasplantadas

Durante años, Luka Krizanac soñó con algo tan simple como sujetar una taza, abrir una puerta o sentir el frío de un vaso en la piel. A los 12 años, una infección mal tratada le provocó una septicemia fulminante que le arrebató partes de sus brazos y piernas. Desde entonces, su vida se convirtió en una serie de adaptaciones: piernas con prótesis que le permitían caminar con relativa autonomía, pero manos artificiales que no lograban devolverle la sensación ni la funcionalidad necesarias para desenvolverse con libertad.

Lee más: Lo que debes saber sobre la EII: FEAT conecta ciencia y comunidad en Mayagüez

Ese sueño de volver a tener manos reales comenzó a tomar forma años después, cuando fue evaluado por un equipo de especialistas en Estados Unidos. En la Universidad de Pensilvania, médicos liderados por el doctor L. Scott Levin lo identificaron como candidato ideal para un doble trasplante de manos, un procedimiento aún experimental, pero con posibilidades de cambiar su vida. Lo prepararon durante dos años: exámenes médicos rigurosos, acompañamiento psicológico, terapias físicas y un compromiso absoluto con lo que vendría después. La pandemia del COVID-19 retrasó todo. Pero Luka no se rindió.

En 2024, viajó desde Zúrich a Filadelfia y esperó con paciencia a que apareciera un donante compatible. Luego de ocho semanas en lista de espera, finalmente llegó la noticia: había manos disponibles. La cirugía duró alrededor de 10 horas y fue una hazaña médica y humana. Al despertar, Luka miró sus nuevas manos y lloró. “Son perfectas”, dijo, como si le hubieran devuelto una parte de sí que había quedado congelada en la infancia.

Seis meses después, ya puede hacer cosas que antes parecían imposibles: escribir en su celular, lavarse la cara, sostener una taza. Lo más impresionante, sin embargo, es cómo ha recuperado sensibilidad: puede sentir el frío, el calor y la textura de los objetos. Y con eso ha vuelto también una sensación de integridad personal que no se mide en números ni estadísticas.

Conoce más: Creatina de la A a la Z: guía esencial para cuerpo, mente y bienestar

Luka forma parte de un grupo muy reducido en el mundo. Solo unas 50 personas han recibido un doble trasplante de manos, y cerca de 100 han sido sometidas a trasplantes de una o más extremidades desde que se realizó el primer caso exitoso en 1999. Uno de los más recordados es el de Zion Harvey, un niño de ocho años que fue el primer menor en recibir ambas manos tras un proceso meticuloso. También está Brendan Marrocco, un soldado estadounidense que perdió sus extremidades en combate y recibió un trasplante doble en 2012.

No todos los casos terminan bien. Algunos pacientes han pedido la amputación de las manos trasplantadas por rechazo o frustración funcional. Otros no logran la independencia esperada. Los riesgos son altos: inmunosupresión de por vida, infecciones, recaídas. Pero para Luka, cada pequeño gesto que hoy puede hacer vale la pena.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Comenta

spot_img

Articulos relacionados

Las más Recientes