Viviendo con asma: estrategias y consejos para una vida saludable
Durante el cierre del mes del aniversario del Fideicomiso de Salud Pública de Puerto Rico, se presentó el panel “Respira Salud: Hablemos del Asma”. El evento contó con la participación de diferentes expertos de la salud enfocados en esta enfermedad.
Los especialistas invitados fueron, el Dr. Wilfredo de Jesús Rojas, neumólogo pediátrico; Dr. Benjamín Bolaños Rosero, catedrático asociado de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Ciencias Médicas; Dr. Jean Pierre Llanos Arckert, neumólogo pediátrico y líder del equipo médico global en el área terapéutica de inflamación AMGEN; Mirelys Valentín López, MPH, Promotora de Salud, Unidad de Prevención y Control de Enfermedades Oficina de manejo y control del asma.
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Sobre la enfermedad
El asma es una enfermedad crónica que afecta las vías respiratorias, dificultando la respiración debido a la inflamación y estrechamiento de los bronquios. Se puede desarrollar en cualquier edad.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta es una de las enfermedades no transmisibles (ENT), la cual afecta a niños y adultos, siendo la condición crónica más habitual en la población infantil. Además, se calcula que 262 millones de personas tenían asma para el 2019 y causó 455.000 fallecimientos.
“Puerto Rico se considera como unos de los países con mayor incidencia a nivel mundial y con mayor mortalidad en el mundo. Hoy en día la prevalencia está por encima de 150.000 mil niños y en adultos es de más de 300 mil pacientes con asma en la isla ”, comentó el Dr. Wilfredo De Jesús Rojas, neumólogo pediátrico.
Es importante tener en cuenta que no todos los pacientes van a manifestar los mismos síntomas siempre, estos pueden ser variables ya que existen distintos tipos de asma. Sin embargo, los signos más frecuentes que se presentan son:
- Dificultad para respirar
- Tos persistente
- Opresiones en el pecho
- Sibilancias
En Puerto Rico existen diversas limitaciones, entre ellas se encuentra la manera en que se realiza el diagnóstico de la enfermedad, ya que el país carece de las herramientas tecnológicas para su desarrollo y la falta de especialistas para atender a los pacientes con asma, de acuerdo a lo expresado por el Dr. Rojas.
“Desde los laboratorios todos los días estamos contribuyendo en la calidad de vida de los pacientes, desde la investigación rigurosa de la enfermedad. Los principales detonantes del asma en Puerto Rico se deben a los factores alérgenos que son: los ácaros, el polvo, los hongos, las mascotas e insectos. Hay otros detonantes que no son alérgenos como, el humo del cigarrillo, las fragancias o las emociones fuertes”, agregó el Dr. Benjamín Bolaños Rosero.
Estar en la casa no significa protección para la enfermedad puesto que los hongos en la isla tienen una temporada, épocas donde se evidencia que llueve con más frecuencia como, mayo, septiembre, octubre y noviembre. En estos meses los niveles de esporas de hongos en el aire son altas.
Educación y comunidad
El Dr. Jean Pierre Llanos comentó que existen dos momentos críticos donde los pacientes deben recibir educación:
- Cuando se recibe el diagnóstico de asma es fundamental conocer de qué trata la enfermedad, cómo se enfrenta y qué pasos se deben seguir para tener una mejor calidad de vida.
- En el momento en que las personas son adultas y llevan muchos años con la enfermedad, en ocasiones creen que ya saben todo sobre su condición y no se someten a nuevos tratamientos para mejorar su calidad de vida.
“Es importante reeducar al paciente, buscando que el objetivo sea darle un bienestar general y una óptima calidad de vida”, añadió el Dr. Pierre.
Mirelys López expresó que, el efecto en las comunidades se evidencia particularmente en el diagnóstico que recibe cada persona, esto va más allá de normalizar la enfermedad sin darnos cuenta de que esta es una condición que nos afecta en nuestra cotidianidad, desde hacer deporte, estudiar, trabajar o la convivencia con la sociedad.
“Cuando los pacientes no siguen las especificaciones indicadas por su médico, generalmente recaen mucho en las salas de emergencias y hospitalizaciones. Es importante conocer cuál es la función de los medicamentos y su adherencia a la enfermedad para poder controlarla”, agregó López.
El asma es una enfermedad que se puede agravar por alergias, infecciones respiratorias, contaminación ambiental o cambios bruscos en el clima. Aunque no tiene cura, puede ser controlada.
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