¿Cómo afecta al cerebro la esclerosis múltiple?
La esclerosis múltiple afecta en gran medida al sistema nervioso central, que está compuesto por el cerebro y la médula espinal junto con el nervio óptico.
Comprendiendo que el cerebro y la médula espinal realizan funciones indispensables para otras partes del organismo, se puede considerar que la esclerosis múltiple afecta prácticamente todos los sistemas y órganos del cuerpo.
Aunque es una condición presente en muchos pacientes, afecta a cada uno de manera independiente y los síntomas no suelen ser los mismos de uno a otro paciente.
Para algunos la sintomatología puede presentarse de forma leve,pero para otros pacientes, los síntomas pueden ser muy intensos y las características de la condición suelen aparecer por períodos con mucha intensidad.
¿Cómo se ve afectado el cerebro?
El cerebro es el primer órgano afectado por la esclerosis múltiple. Los pacientes con este diagnóstico pueden presentar dificultades en la concentración, problemas de memoria y fallas en otras funciones cognitivas. A su vez, pueden presentar otros signos como mareos y no son características propias de la condición los temblores o convulsiones.
Otras partes del cuerpo como el corazón también se ven afectadas, especialmente en las mujeres con ese diagnóstico que suelen tener una relación con una alta incidencia de enfermedades cardiovasculares.
También los pacientes con EM pueden presentar problemas de visión, caracterizados por la presencia de visión doble, borrosa y dolor ocular.
El intestino, los oídos, la boca, el sistema reproductor y las extremidades son otras de las partes del cuerpo que comúnmente se ven afectadas por la esclerosis múltiple, llevando al paciente a presentar problemas de coordinación, equilibrio, habla, problema de fertilidad, problemas del habla, dificultad para tragar o afecciones en la audición.
Según la ubicación de las fibras nerviosas afectadas. Los síntomas a menudo afectan el movimiento, tales como:
- Entumecimiento o debilidad en una o más extremidades.
- Sensaciones de choques eléctricos que se producen con ciertos movimientos del cuello (signo de Lhermitte)
- Temblores, falta de coordinación o marcha inestable.
La fisioterapia resulta efectiva para ayudar al paciente a trabajar y mantener el equilibrio, la capacidad de caminar y el nivel de movilidad, y para reducir la espasticidad y la debilidad.
Es importante que el paciente busque mantener activo su cerebro realizando actividades como montar bicicleta estática, nadar, realizar estiramientos o caminar,buscando mejorar la calidad de vida y evitando otras complicaciones como la ansiedad o crisis por estrés.
Fuente: Mayo Clinic y Con la EM
