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*Apoyado por Esclerosis MúltipleEsclerosis múltiple

Problemas visuales en la esclerosis múltiple

Los problemas de visión, también llamados trastornos visuales, son un síntoma común de la esclerosis múltiple (EM) debido a los efectos de la enfermedad sobre el sistema nervioso central (SNC). El proceso de desmielinización, o la pérdida de mielina (la sustancia que rodea los nervios), que es la causa de la EM, termina afectando diferentes funciones del sistema nervioso. Como resultado, algunas personas con esclerosis múltiple pueden sufrir un deterioro de la vista.

«En uno de cada cinco pacientes con esclerosis múltiple, su primer síntoma está relacionado con la afectación del nervio óptico», así precisó la doctora Deborah Parish, médica entrenada en neurooftalmología a BeHealth.

Según explicó, cuando el nervio óptico está afectado y el paciente empieza con neuritis óptica aguda, frecuentemente esos pacientes pueden tener síntomas como dolor cuando mueven los ojos. Además, agregó que casi siempre hay una ojo más afectado del otro, «particularmente en la esclerosis múltiple se evidencia visión borrosa, dificultad con la percepción de los colores, nubes en el campo visual con áreas blancas grises o negras».

Adicionalmente, el paciente puede presentar molestias en situaciones donde no existe tanto contraste de luz.

La doctora explicó además que estos pacientes también presentan problemas neurológicos, a la vez de estos relacionados con la visión. Entre ellos resaltó los cambios en la percepción de la temperatura en algunas partes de su cuerpo en comparación con otras, adormecimiento, debilidad, dolor, cansancio, cambios en el estado de ánimo, dolor de cabeza, «hay un gran número de síntomas neurológicos que el paciente presenta de forma secundaria».

«Si usted, como paciente o familiar de un paciente, encuentra estos síntomas es importante que vaya de manera inmediata a su neurólogo para un chequeo y saber que está pasando. Entre más rápido diagnostiquemos esos brotes mejor será la respuesta».

Según refiere la especialista, para detectar si un paciente tiene esclerosis múltiple el primer examen va a ser un MRI  o una resonancia magnética en los nervios ópticos y el cerebro. También existen otros biomarcadores como la tomografía ocular «que nos da una medida de la inflamación alrededor del nervio óptico, la cual nos indica directamente los cambios en la zona o neuronas de un paciente con esclerosis múltiple cambios que tienen una relación directa con la actividad de esclerosis múltiple en el cerebro».

Además, tiene una relación directa con la atrofia cerebral de este paciente y permite establecer la progresión de la esclerosis múltiple en el paciente no solamente en los ojos:

«Nos indica directamente los cambios en la zona o neuronas de un paciente con esclerosis múltiple, cambios que tienen una relación directa con la actividad de esclerosis múltiple en el cerebro y también tienen una relación directa con la atrofia cerebral».

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