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Cuatro datos clave que debes conocer sobre la dermatitis atópica

Eczema es un término que designa varios tipos distintos de hinchazón de la piel. También se llama dermatitis. La mayoría de los tipos causa sequedad y comezón en la piel, además de sarpullido en la cara, al interior de los codos y detrás de las rodillas; y en las manos y los pies. Rascarse la piel puede enrojecerla, aumentando la hinchazón y picazón.

Existen siete tipos diferentes de eczema:

  • Dermatitis atópica
  • Dermatitis de contacto
  • Neurodermatitis
  • Eczema dishidrótico
  • Eczema numular
  • Dermatitis seborreica
  • Dermatitis por estasis

Hoy hablaremos sobre el primero, la dermatitis atópica o eczema atópico, la cual es la forma más común de eczema, una enfermedad que provoca picor, sequedad y grietas en la piel.

El eczema atópico es más común en los niños, y a menudo se desarrolla antes de su primer cumpleaños. Pero también puede desarrollarse por primera vez en adultos.

Suele ser una afección de larga duración (crónica), aunque puede mejorar significativamente, o incluso desaparecer por completo, en algunos niños a medida que crecen.

1. ¿Cuáles son los síntomas del eczema o dermatitis atópica?

El eczema hace que algunas zonas de la piel piquen, se resequen, se agrieten y se irriten.

Suele haber períodos en los que los síntomas mejoran, seguidos de períodos en los que empeoran (brotes). Los brotes pueden producirse hasta 2 o 3 veces al mes.

El eczema puede aparecer en todo el cuerpo, pero es más frecuente en las manos (sobre todo en los dedos), el interior de los codos o el dorso de las rodillas, y la cara y el cuero cabelludo en los niños.

La gravedad del eczema atópico puede variar mucho de una persona a otra. Las personas con eczema leve pueden tener solo pequeñas zonas de piel seca que ocasionalmente pican. En los casos más graves, el eczema atópico puede provocar una inflamación generalizada de la piel en todo el cuerpo y un picor constante.

Rascarse puede interrumpir el sueño, hacer sangrar la piel y provocar infecciones secundarias. También puede empeorar el picor, y puede desarrollarse un ciclo de picor y rascado regular. Esto puede provocar noches de insomnio y dificultad para concentrarse en la escuela o el trabajo.

Las zonas de la piel afectadas por el eczema también pueden volverse temporalmente más oscuras o más claras después de que la afección haya mejorado. Esto es más evidente en las personas con piel más oscura. No se trata de una cicatrización ni de un efecto secundario de las cremas con esteroides, sino más bien de una «huella» de la antigua inflamación y, con el tiempo, el tono de la piel vuelve a su color normal.

Signos de infección

En ocasiones, las zonas de la piel afectadas por el eczema atópico pueden infectarse. Los signos de una infección pueden ser:

  • Empeoramiento del eczema
  • Salida de líquido de la piel
  • Costra amarilla en la superficie de la piel o la aparición de pequeñas manchas blanco-amarillentas en el eczema
  • que provocan que la piel se hinche y duela
  • Sensación de calor y escalofríos y malestar general

2. ¿Qué factores ocasionan el eczema?

Es probable que el eczema atópico esté causado por una combinación de factores. Las personas con esta condición suelen tener la piel muy seca porque su piel no puede retener mucha humedad. Esta sequedad puede hacer que la piel sea más propensa a reaccionar a ciertos factores desencadenantes, provocando picor y dolor.

Además, la persona puede nacer con una mayor probabilidad de desarrollar eczema atópico debido a los genes que hereda de sus padres.

Es importante saber que el eczema atópico no es infeccioso, por lo que no se transmite por contacto directo.

Factores desencadenantes del eczema

Hay una serie de cosas que pueden desencadenar los síntomas del eczema y pueden variar de una persona a otra.

Los desencadenantes más comunes son:

  • Irritantes: como los jabones y detergentes, incluidos el champú, el detergente, etc.
  • Factores ambientales o alérgenos: como el clima frío y seco, la humedad y cosas más específicas como los ácaros del polvo doméstico, el pelo de las mascotas, el polen y el moho.
  • Alergias alimentarias, como la leche de vaca, los huevos, los cacahuetes, la soja o el trigo.
  • Ciertos materiales como la lana y los tejidos sintéticos.
  • Cambios hormonales: las mujeres pueden experimentar un empeoramiento de los síntomas en los días previos a la menstruación o durante el embarazo.
  • Infecciones cutáneas
  • Algunas personas también señalan que sus síntomas empeoran cuando el aire es seco o polvoriento, o cuando están estresadas, sudan o tienen demasiado calor o demasiado frío.

3. ¿Cómo curar eczemas en la piel?

Los tratamientos para el eczema atópico pueden ayudar a aliviar los síntomas. No hay cura, pero muchos niños descubren que sus síntomas mejoran de forma natural a medida que crecen.

Los principales tratamientos para el eczema atópico son:

  • Emolientes (humectantes): se utilizan a diario para evitar que la piel se reseque
  • Corticosteroides tópicos: cremas y pomadas que se utilizan para reducir la hinchazón y el enrojecimiento durante los brotes.

Otros tratamientos incluyen tópicos para el eczema en zonas sensibles que no responden a un tratamiento más sencillo, antihistamínicos para el picor intenso e incluso vendajes o trajes especiales para permitir que el cuerpo sane.

También puedes leer: ¿Cómo aliviar la dermatitis atópica en niños y ancianos?

4. ¿Cuáles cuidados personales debo tener en cuenta?

Además de los tratamientos mencionados anteriormente, hay cosas que puedes hacer tú mismo para ayudar a aliviar los síntomas y prevenir más problemas.

Intenta reducir el daño causado por el rascado

El eczema suele picar, y puede ser muy tentador rascarse en las zonas afectadas de la piel. Pero rascarse suele dañar la piel, lo que a su vez puede provocar la aparición de más eczemas. La piel acaba por engrosarse hasta convertirse en zonas correosas como resultado del rascado crónico. El rascado profundo también provoca hemorragias y aumenta el riesgo de que la piel se infecte o cicatrice.

  • Intenta reducir el rascado siempre que sea posible. Puedes probar a frotarte suavemente la piel con los dedos en su lugar.
  • Si tu bebé tiene un eczema atópico, unas manoplas anti-rascado pueden evitar que se rasque la piel.
  • Mantén las uñas cortas y limpias para minimizar los daños en la piel por el rascado involuntario.
  • Mantén su piel cubierta con ropa ligera para reducir el daño causado por el rascado habitual.

Evitar los desencadenantes

El médico de cabecera trabajará contigo para determinar qué puede desencadenar los brotes de eczema, aunque puede mejorar o empeorar sin ninguna razón evidente.

Una vez que conozcas los factores desencadenantes, puedes intentar evitarlos. Por ejemplo, ciertos tejidos que irriten la piel o el uso de jabones o detergentes.

Cambios en la dieta

Algunos alimentos, como los huevos y la leche de vaca, pueden desencadenar síntomas de eczema. Pero no debes hacer cambios significativos en tu dieta sin hablar primero con un médico de cabecera. Puede que no sea saludable eliminar estos alimentos de la dieta, especialmente en el caso de los niños pequeños, que necesitan el calcio, las calorías y las proteínas de estos alimentos.

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