Educando sobre la enfermedad psoriásica: todo lo que debes saber

La enfermedad psoriásica es una condición sistémica inflamatoria que afecta en distintas partes del cuerpo. Las lesiones en la piel son las predominantes, pero también se pueden manifestar en las articulaciones o en ambas.

La condición se manifiesta en la piel con manchas rojas en la piel cubiertas con escamas plateadas es la comúnmente llamada psoriasis. Al añadir dolor articular es un tipo de artritis llamado artritis psoriásica. Esta afecta los tendones y articulaciones. En algunas ocasiones la artritis se manifiesta primero.

Cabe aclarar que esta condición autoinmune que no es contagiosa, pero sí posee cierta predisposición genética relacionada a antecedentes familiares, entre otros factores.

Por ejemplo, precisan los reumatólogos, dentro de los causantes de esta enfermedad podrían presentarse infecciones, factores ambientales e incluso, si tuviste algún golpe o manejas altos niveles de estrés, podrías tener mayor riesgo de desarrollarla.

Fases de la enfermedad

Existen diversos estadios o etapas de este tipo de artritis que, en la mayoría de veces, afecta múltiples partes del cuerpo, principalmente la piel, las articulaciones o ambas. De acuerdo con la Federación Internacional de Asociaciones de Psoriasis (IFPA), las manifestaciones más recurrentes son:

Crónica: la enfermedad psoriásica no se puede curar y podría traer recaídas periódicamente.

Dolorosa: la inflamación crónica provoca dolor, especialmente en las articulaciones y la espalda.

Desfiguración: cuando la patología se presenta de forma grave podría generar desfiguración permanente.

Discapacitante: si no se trata o si se trata de forma inadecuada, la inflamación crónica de las articulaciones puede provocar una discapacidad permanente.

Inflamatoria: cuando la enfermedad psoriásica ocasiona demasiada inflamación al punto de ser crónica, podría generar daños en múltiples partes del cuerpo y puede contribuir a la depresión.

Cómo incide en el ser humano

La artritis psoriásica podría alterar el ciclo de vida de las células cutáneas, lo que genera la aceleración de las mismas causando lesiones de distinta gravedad y aspecto. Cuando esto pasa podrían presentarse algunos síntomas como:

• Hinchazón
• Dolor articular
• Dificultad en el movimiento
• Lesiones cutáneas

Además, de acuerdo con la literatura médico-científica, quienes sean diagnosticados con la enfermedad psoriásica tendrían mayor riesgo de enfermedades no transmisibles como

• Hipertensión
• Obesidad
• Dislipidemia
• Diabetes
• Síndrome metabólico
• Enfermedad cardiovascular
• Enfermedad inflamatoria intestinal
• Impacto en la salud mental

Manifestaciones de la condición y cómo enfrentarla

La psoriasis por sí sola podría causar manchas rojas y escamosas que pican, sobre todo en las rodillas, los codos, el tronco y el cuero cabelludo. Sin embargo, cuando un paciente desarrolla esta patología combinada con artritis, también podría enfrentarse a un fuerte dolor en las articulaciones, ligamentos y tendones causando rigidez e hinchazón.

La buena noticia es que puede tratarse; sin embargo, ten en cuenta que los métodos utilizados serán para contrarrestar la sintomatología y evitar que se agraven, dado que la artritis psoriásica no tiene cura. No obstante, evita automedicarte y siempre que utilices alguna táctica para tu enfermedad, debe ser estrictamente prescrita por un médico, preferiblemente un reumatólogo o internista.

De acuerdo con IFPA, algunos de los métodos más comunes y efectivos son:

• Medicamentos para aplicar en la piel (tópicos)
• Fototerapia
• Fármacos biológicos
• Tratamientos sistémicos