Ibuprofeno: todo lo que necesitas saber antes de tomarlo
El ibuprofeno es una sustancia activa perteneciente al grupo de los antiinflamatorios no esteroideos (AINE). Más concretamente, es un derivado del ácido propiónico con actividad analgésica, antiinflamatoria y antipirética.
¿Qué es el ibuprofeno?
El ibuprofeno está disponible en numerosas formulaciones farmacéuticas (comprimidos, jarabe, suspensión oral, gotas orales, gel para la piel, soluciones vaginales, supositorios, parches medicinales, etc.) adecuadas para diferentes vías de administración (oral, tópica, vaginal, rectal, intramuscular e intravenosa) para el tratamiento de una amplia variedad de dolencias, aunque siempre caracterizadas por la inflamación, el dolor y/o la fiebre.
Indicaciones terapéuticas: ¿cuándo usar ibuprofeno?
El ibuprofeno es un componente activo que se utiliza en el tratamiento de muchos trastornos diferentes. Las indicaciones pueden variar según la formulación farmacéutica, es decir, la vía de administración, y la dosis del principio activo contenido en el medicamento.
Tratando de resumir todas las posibles indicaciones del componente activo en cuestión, se puede afirmar que el uso del ibuprofeno está indicado para el tratamiento de:
- Dolores leves o moderados de diversos orígenes en adultos y niños, tales como dolor de cabeza, dolor cervical, dolor de garganta, dolor menstrual, dolor debido a lesiones accidentales o deportivas, dolor de muelas, dolor posparto, dismenorrea, dolores postoperatorios de diversa índole, dolor debido a enfermedades reumáticas (administración oral o rectal)
- Fiebre y dolor asociados con el resfriado común en adultos y niños (administración oral o rectal)
- Osteoartritis en todas sus formas y localizaciones (administración oral)
- Inflamación específica del sistema genital femenino (administración vaginal)
- Profilaxis pre y postoperatoria en cirugía ginecológica (administración vaginal)
- Contusiones, esguinces, dolor muscular y desgarros, tortícolis (administración tópica)
- Inflamación reumática y traumática de músculos, tendones, articulaciones y ligamentos (administración tópica)
- Episodios dolorosos agudos en caso de enfermedades inflamatorias del sistema musculoesquelético (administración intramuscular)
Lo que necesitas saber antes de tomar Ibuprofeno
Las advertencias y precauciones pueden variar según el tipo de medicamento utilizado. Enumeramos algunos de ellos a continuación, pero de nuevo, por favor, consulta el prospecto del medicamento que se va a utilizar.
Antes de comenzar a tomar ibuprofeno en cualquiera de sus formas, debes informar a tu médico acerca de tu estado de salud y de la presencia de cualquier trastorno o enfermedad de cualquier tipo, a fin de poner en evidencia cualquier condición que pueda ser una contraindicación o un riesgo para el uso del principio activo.
En particular, debes informar a tu médico si:
- Sufres de deterioro de la función renal, hepática y/o cardíaca, ya que los pacientes que sufren estos trastornos deben ser controlados de cerca. En cualquier caso, el uso de la sustancia activa en pacientes con una función cardíaca, hepática y/o renal deficiente requiere la máxima precaución
- Sufres de hipertensión y/o insuficiencia cardíaca congestiva
- Sufres de asma bronquial, rinitis crónica o enfermedades alérgicas
- Sufres trastornos de coagulación, ya que el ibuprofeno, como muchos otros AINE, puede prolongar el tiempo de sangrado.
El ibuprofeno y otros antiinflamatorios
El ibuprofeno no debe utilizarse conjuntamente con otros medicamentos antiinflamatorios (por ejemplo, flurbiprofeno, ketoprofeno, nimesulida, etc.), ya que esas asociaciones pueden aumentar el riesgo de hemorragias, ulceraciones o perforaciones gastrointestinales, a veces con resultados incluso fatales. Por lo tanto, debe evitarse la asociación con ingredientes activos como el flurbiprofeno (presente en muchos aerosoles para la garganta), el ketoprofeno (Oki®), la nimesulida, etc.
Sin embargo, el ibuprofeno puede causar perforación y hemorragia gastrointestinal incluso cuando se usa solo. Por esta razón, si aparece algún síntoma gastrointestinal de cualquier tipo, el médico debe ser informado inmediatamente.
