La gastritis atrófica es un proceso inflamatorio crónico del revestimiento del estómago.
Síntomas y complicaciones
La inflamación crónica de las paredes del estómago provoca la pérdida del componente glandular, subvirtiendo la función gástrica normal; así, en presencia de gastritis atrófica, vemos la aparición gradual de hipoclorhidria y aclorhidria, con dispepsia y trastornos gastrointestinales asociados con hipergastrinemia, déficit o falta de secreción de pepsinógeno y factor intrínseco.
Además, a falta de un tratamiento adecuado, puede producirse anemia perniciosa e hiperhomocisteinemia debido a la deficiencia de vitamina B12, especialmente en los ancianos.
En presencia de gastritis atrófica, el riesgo de cáncer gástrico también aumenta, especialmente cuando la enfermedad tiene un origen autoinmune.
Causas de la gastritis atrófica
La gastritis atrófica puede ser causada por una inflamación gástrica crónica – como la gastritis dependiente de Helicobacter pylori – o tener un origen autoinmune.
En el primer caso, la gastritis atrófica se centra en la cavidad y luego se extiende a toda la mucosa (gastritis atrófica multifocal); en cambio, cuando se debe a anticuerpos anormales que atacan a las células parietales del estómago y al factor intrínseco (gastritis atrófica autoinmune), involucra electivamente al fondo y al cuerpo.
Complicaciones de la gastritis atrófica
Ambas formas están estadísticamente relacionadas con una mayor incidencia de cáncer de estómago; en la forma autoinmune, la asociación con la tiroiditis de Hashimoto, la tirotoxicosis, el mixodema, la enfermedad de Addison y la diabetes de tipo I también es más frecuente.
El daño a la mucosa gástrica se debe a la acción de las «toxinas» bacterianas o a la acción de estos anticuerpos; entre las dos formas, es más marcado en la gastritis atrófica autoinmune.
Síntomas de la gastritis atrófica
Debido a que esta enfermedad no suele presentar síntomas, muchos casos de GA no se diagnostican.
La infección por H. pylori podría causar lo siguiente:
- dolor de estómago
- náuseas y vómitos
- falta de apetito
- pérdida de peso
- úlceras estomacales
- cáncer de estómago
- anemia ferropénica que no responde al tratamiento
La GA autoinmunitaria puede derivar en deficiencia de vitamina B-12 y presentar los síntomas típicos de la anemia, entre ellos:
- debilidad
- desfallecimiento
- mareos
- dolor en el pecho
- palpitaciones
- zumbido en los oídos
La deficiencia de vitamina B-12 también puede causar daños en los nervios, lo que podría derivar en lo siguiente:
- rigidez y hormigueo en las extremidades
- inestabilidad al caminar
- cambios a nivel mental