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Legado del Dr. Héctor Martínez en la Cardiología Intervencional

El mundo de la medicina es vasto y diverso, pero para quienes eligen el camino de la cardiología intervencional, la gratificación de salvar vidas y mejorar el bienestar de los pacientes es la fuerza motriz detrás de su elección.

El Dr. Héctor Martínez González, cardiólogo intervencional y director de Cardiología en el Mayagüez Medical Center de Puerto Rico, es un ejemplo de esta dedicación y pasión por la medicina. En entrevista exclusiva con BeHealth, el doctor compartió sus experiencias, desafíos y visión para el futuro de la cardiología intervencional en Puerto Rico.

Una profesión, una vocación

Cuando le preguntaron sobre su motivación para ingresar a la medicina, el Dr. Martínez González fue claro en su respuesta: la vocación de servir a los demás es el motor que impulsa su carrera. Para él, la medicina no es simplemente una profesión, sino una llamada profunda para ayudar a las personas en sus momentos de mayor necesidad. Destacó que, para aquellos interesados en la medicina, es fundamental tener un deseo genuino de servir, ya que esta profesión es profundamente gratificante, pero también muy exigente.

“Elegir la medicina es una decisión que está arraigada en el deseo de ayudar a los pacientes. Si no tenemos un deseo profundo de servir a los demás, la medicina no es la elección adecuada”, dijo.

Para los estudiantes de medicina interesados en la cardiología intervencional, el Dr. Martínez González ofreció consejos valiosos. Les anima a abrazar la filosofía de mejora continua y a mantenerse enfocados en el objetivo de brindar atención médica excepcional a los pacientes. También les recuerda que, en esta especialidad, es crucial mantener la humildad y recordar que son parte de un equipo que trabaja para ayudar a los pacientes. 

Cardiología intervencional: lo que había antes y lo que tenemos ahora

La cardiología intervencional es una especialidad que ha experimentado un rápido avance tecnológico en las últimas décadas, y el Dr. Martínez González encuentra este dinamismo particularmente emocionante.

Según él, «lo que me fascina es el uso de tecnología avanzada para realizar cirugías mínimamente invasivas a través de catéteres». Destaca cómo «cada año, tenemos que aprender algo nuevo debido a la continua evolución tecnológica» y cómo esta especialidad ha evolucionado para tratar «procedimientos complejos como el tratamiento de arterias coronarias crónicamente obstruidas o reemplazo percutáneo de válvulas en pacientes con corazones debilitados, procedimientos que eran impensables hace unos años».

“Esa dinámica y el hecho de que estamos parados sobre los hombros de gigantes, como el Dr. Brown en radiología, quienes fueron pioneros en la especialidad, son aspectos que me atraen. No hemos inventado nuevas técnicas, sino que refinamos y adaptamos las desarrolladas por visionarios”, confirmó. 

Según las palabras del doctor Martínez González, la cardiología intervencional ha vivido una transformación significativa a lo largo de los años. Esta especialidad tuvo sus inicios en la década de 1970 con el uso de un balón que se insertaba percutáneamente a través de un pequeño agujero en la piel para destapar las arterias coronarias, mejorando así el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno al corazón. En ese entonces, esta técnica era bastante rudimentaria.

No obstante, a medida que las décadas avanzaron, especialmente en los años 80 y 90, se introdujeron nuevos dispositivos y tecnologías, como los stents coronarios, que son mallas utilizadas para mantener las arterias abiertas. Estos stents evolucionaron con el tiempo y, desde 2013, comenzaron a recubrirse con medicamentos especiales para prevenir la reoclusión de las arterias.

“En el año 2023, hemos adoptado la cuarta y quinta generación de estos dispositivos, los cuales se caracterizan por su mayor nivel de seguridad. El riesgo de que las arterias se vuelvan a obstruir o de que ocurran complicaciones se ha reducido significativamente, llegando a ser inferior al 1%. Además, la mayoría de los pacientes pueden ser dados de alta en menos de 24 horas, a veces incluso el mismo día de la intervención”, refirió.

Un cambio igualmente relevante ha sido la transformación en la forma en que se accede a las arterias para llevar a cabo estos procedimientos. Mientras que en el pasado se solía utilizar el acceso femoral en la ingle, en la actualidad se prefiere el acceso radial a través del brazo o la mano, lo que proporciona mayor comodidad y seguridad para los pacientes.

“En nuestro hospital, el Mayagüez Medical Center, somos especialistas en procedimientos radiales, lo que brinda a los pacientes una recuperación más rápida y menos molestias”, aseveró el especialista.

Desafíos en el campo de la cardiología intervencional 

Para el doctor, los desafíos de la cardiología intervencional son diversos y, en Puerto Rico, tienden a ser aún mayores. Esto se debe a factores como la falta de acceso a tecnología avanzada y la necesidad de formación continua para mantenerse al día con los avances en la especialidad. A pesar de esto, el doctor señala que se encuentran comprometidos en “superar estos obstáculos y seguir brindando la mejor atención posible a nuestros pacientes. Trabajamos en estrecha colaboración con otros especialistas y nos esforzamos por mantenernos actualizados para abordar los desafíos en constante evolución de la cardiología intervencional”.

Asimismo, trabajar con los planes médicos y atender a una población diversa y, en ocasiones, desfavorecida es uno de los principales retos. Desde su perspectiva, el mayor problema en Puerto Rico es la falta de recursos, que incluye no solo el financiamiento sino también la disponibilidad de personal y equipos médicos de vanguardia. 

“Si nos comparamos con los Estados Unidos, vemos que estamos significativamente desfavorecidos en términos de recursos financieros y de personal. Los hospitales en Puerto Rico reciben menos del 11% de la financiación que reciben los hospitales en los Estados Unidos. Esto significa que tenemos que hacer más con menos, lo que es un desafío constante”. 

Identificando necesidades críticas en la población puertorriqueña

El doctor también contó que, hace aproximadamente 10 años, cuando llegó al área oeste de Puerto Rico, identificó una necesidad crítica para realizar procedimientos de alto riesgo.

“Estos pacientes, lamentablemente, carecían de opciones viables. Hablamos de un grupo que representaba alrededor del 10 al 15% de los pacientes que atendemos anualmente, lo que equivale a unos 100 pacientes al año. En ese momento, no teníamos soluciones adecuadas para ellos”.

Sin embargo, actualmente se han adquirido técnicas y tecnología “que permiten realizar procedimientos que, en muchos sentidos, pueden considerarse heroicos. Si tenemos éxito, podemos salvarles la vida a estos pacientes”. 

En Mayagüez Medical Center también se han incorporado dispositivos de alto costo para estos procedimientos, y están trabajando en colaboración con los planes médicos “para garantizar que los pacientes tengan acceso a estos tratamientos”.

“Durante mi tiempo en este hospital, hemos sido testigos de cómo la tecnología ha avanzado y nos ha permitido brindar beneficios a los pacientes en el área oeste de Puerto Rico», dijo.

Además, señaló que el hospital es el único en el área oeste con un intensivo cardiovascular y otros servicios especializados en electrofisiología, lo que “nos permite tratar una amplia gama de condiciones cardiovasculares”.

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Logros y contribuciones del Dr. Héctor Martínez González

“Considero que mi mayor contribución ha sido identificar y ayudar a estos pacientes, ofreciéndoles terapias que antes no estaban disponibles”, dijo el médico y agregó que se siente agradecido por trabajar en un equipo de cardiólogos intervencionistas visionarios en Puerto Rico, con quienes comparte logros y metas para mejorar constantemente.

“En el Mayagüez Medical Center nos hemos centrado en ser un centro de excelencia y hemos entrenado a médicos de toda América Latina en las últimas técnicas. También hemos destacado en procedimientos de alto riesgo, como la aterectomía por ablación, que son extremadamente complejos tanto desde una perspectiva técnica como para los pacientes”.

El galeno se enorgullece de su contribución a la comunidad a través de su especialidad, especialmente al atender a pacientes que previamente carecían de opciones viables debido a condiciones de alto riesgo. 

“La relación médico-paciente es significativa, especialmente cuando vemos a los pacientes mejorar tras las intervenciones. A veces, trabajamos largas horas y no tenemos un horario fijo, pero cuando vemos a un paciente decir: ‘Doctor, gracias por lo que hizo, estoy vivo y mi vida ha cambiado gracias a usted y al equipo de cardiología’, eso es lo que hace que valga la pena ser médico”, compartió.

Otro logro que destacó con orgullo el cardiólogo es la introducción del reemplazo de válvula aórtica percutánea en el Mayagüez Medical Center:

“Mi equipo y yo fuimos los pioneros en este procedimiento en nuestro hospital, y ha sido un gran avance. Durante casi tres años, hemos ofrecido esta terapia a más de 150 personas, brindándoles no solo una vida más larga sino también un cambio dramático en su calidad de vida”. 

El futuro de la cardiología intervencional en Puerto Rico

El doctor mantiene una visión optimista de que se puede seguir mejorando y superando los obstáculos a través de la colaboración y la determinación. Afirma además que, desde el centro médico, seguirán expandiendo los servicios para beneficio de los puertorriqueños.

“Nuestro enfoque principal será abrir una nueva sala de cateterismo dedicada a estudios estructurales, específicamente, el tratamiento de las válvulas cardíacas. Esto incluirá procedimientos de reemplazo percutáneo de válvulas cardíacas, una terapia prometedora que creemos estará disponible para la población en los próximos cinco años”. 

“Hemos incorporado jóvenes médicos cardiólogos intervencionistas internacionales para expandir nuestra capacidad de ayuda a los pacientes. Estamos viendo un aumento en la cantidad de pacientes que podemos ayudar, y esto es muy alentador. Estoy agradecido por la colaboración que tenemos y el respaldo de la administración del hospital”, finalizó.

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