8 consejos para evitar la resequedad en la enfermedad de Sjögren
El síndrome de Sjögren hace que el sistema de defensa o inmunitario de su cuerpo ataque las glándulas que producen humedad. La afección afecta las glándulas lagrimales y salivales y, a veces, otras partes del cuerpo. Los ojos y la boca se secan mucho. El síndrome de Sjögren también puede causarle mucho cansancio y dolor en las articulaciones. Unas pocas personas pueden tener problemas con los pulmones, los riñones y los nervios.
El impacto de la enfermedad de Sjögren en la calidad de vida del paciente es de gran importancia debido a la variedad de funciones que pueden verse afectadas, principalmente por la sequedad, fatiga y el compromiso de órganos vitales.
Esta condición tiene un impacto significativo en múltiples aspectos del día a día de los pacientes, abarcando lo físico, laboral, psicológico, económico y sus relaciones con familiares y amigos. Aunque a diferencia de otras enfermedades autoinmunes sistémicas, la enfermedad de Sjögren no suele asociarse con un rápido deterioro de los síntomas o cambios dramáticos a lo largo de los años.
Sin embargo, es fundamental considerar simples cambios en el estilo de vida para ayudar a mejorar los síntomas de sequedad y hacer que las actividades diarias sean más cómodas. Con el enfoque adecuado, se puede brindar un mejor bienestar y calidad de vida a quienes enfrentan esta condición.
Consejos para evitar la resequedad en la enfermedad de Sjögren
Sjögren es una enfermedad autoinmune crónica que afecta principalmente a las glándulas exocrinas, provocando una disminución de la secreción de saliva y lágrimas. Esta condición puede causar sequedad extrema de la boca, ojos, piel y otras áreas del cuerpo, lo que puede afectar seriamente la calidad de vida del paciente. Estos son algunos consejos útiles para aliviar y prevenir la sequedad asociada con la enfermedad de Sjögren.
1. Hidratación constante
Beber agua regularmente es fundamental para mantener una buena hidratación y compensar la falta de producción de saliva. Lleva contigo una botella de agua y toma pequeños sorbos a lo largo del día te ayudará a aliviar la boca y la garganta secas.
2. Humedad de la habitación
Utiliza humidificadores en tu hogar, especialmente en las habitaciones donde pasas más tiempo, como el dormitorio y la sala. Los humidificadores ayudan a mantener el ambiente húmedo y alivian la sequedad de los ojos y la piel.
3. Cuidado de los ojos
Usa lágrimas artificiales o gotas para los ojos recomendadas por un oftalmólogo para mantener sus ojos hidratados y prevenir la sequedad ocular. Evita frotarte los ojos, ya que esto puede empeorar la irritación.
4. Cuidado bucal
Practica una buena higiene bucal, cepíllate los dientes después de cada comida y usa hilo dental todos los días. También puedes usar un enjuague bucal sin alcohol para ayudar a mantener tu boca hidratada y prevenir problemas dentales asociados con la boca seca.
5. Protege tu piel
Usa humectantes y cremas para mantener tu piel suave e hidratada. Evita los productos que contengan fragancias o ingredientes irritantes. También protege tu piel del sol usando bloqueador solar y ropa adecuada.
6. Nutrición adecuada
Come muchos alimentos hidratantes, como frutas y verduras frescas, que contienen mucha agua. Evita los alimentos que pueden aumentar la sequedad, como el alto contenido de sal o azúcares refinados.
7. Evita ambientes muy secos
Intenta evitar lugares con exceso de aire acondicionado o calefacción ya que esto puede empeorar la sequedad. Si es necesario, usa una bufanda o mascarilla para protegerse la boca y la nariz del aire frío y seco.
8. Descanso adecuado
Asegúrate de dormir lo suficiente y sigue una rutina de descanso regular. El sueño adecuado es esencial para la recuperación y el rejuvenecimiento del cuerpo.
Fuentes: Cigna Health Care, Sociedad Española de Reumatología y Asociación Española de Sjögren
